xoves, 12 de decembro de 2019

MCER - T2


¡Hola a todxs!

En la entrada de hoy hablaremos sobre el Marco Común Europeo de Referencia para las lenguas (MCER) y mi experiencia personal relacionada con él.




El MCER es una herramienta para que las titulaciones tengan el mismo valor en toda la comunidad europea. Divide el aprendizaje de un idioma en niveles:



Estos niveles se subdividen en aptitudes:


Usuario competente
C2
Es capaz de comprender con facilidad prácticamente todo lo que oye o lee.
Sabe reconstruir la información y los argumentos procedentes de diversas fuentes, ya sean en lengua hablada o escrita, y presentarlos de manera coherente y resumida.
Puede expresarse espontáneamente, con gran fluidez y con un grado de precisión que le permite diferencias pequeños matices de significado incluso en situaciones de mayor complejidad.
C1
Es capaz de comprender una amplia variedad de textos extensos y con cierto nivel de exigencia, así como reconocer en ellos sentidos implícitos.
Sabe expresarse de forma fluida y espontánea sin muestras muy evidentes de esfuerzo para encontrar la expresión adecuada.
Puede hacer un uso flexible y efectivo del idioma para fines sociales, académicos y profesionales.
Puede producir textos claros, bien estructurados y detallados sobre temas de cierta complejidad, mostrando un uso correcto de los mecanismos de organización, articulación y cohesión del texto.
Usuario independiente
B2
Es capaz de entender las ideas principales de textos complejos que traten de temas tanto concretos como abstractos, incluso si son de carácter técnico, siempre que estén dentro de su campo de especialización.
Puede relacionarse con hablantes nativos con un grado suficiente de fluidez y naturalidad, de modo que la comunicación se realice sin esfuerzo por parte de los interlocutores.
Puede producir textos claros y detallados sobre temas diversos, así como defender un punto de vista sobre temas generales, indicando los pros y los contras de las distintas opciones.
B1
Es capaz de comprender los puntos principales de textos claros y en lengua estándar si tratan sobre cuestiones que le son conocidas, ya sea en situaciones de trabajo, de estudio o de ocio.
Sabe desenvolverse en la mayor parte de las situaciones que pueden surgir durante un viaje por zonas donde se utiliza la lengua.
Es capaz de producir textos sencillos y coherentes sobre temas que le son familiares o en los que tiene un interés personal.
Puede describir experiencias, acontecimientos, deseos y aspiraciones, así como justificar brevemente sus opiniones o explicar sus planes.
Usuario básico
A2
Es capaz de comprender frases y expresiones de uso frecuente relacionadas con áreas de experiencia que le son especialmente relevantes (información básica sobre sí mismo y su familia, compras, lugares de interés, ocupaciones, etc.).
Sabe comunicarse a la hora de llevar a cabo tareas simples y cotidianas que no requieran más que intercambios sencillos y directos de información sobre cuestiones que le son conocidas o habituales.
Sabe describir en términos sencillos aspectos de su pasado y su entorno, así como cuestiones relacionadas con sus necesidades inmediatas.
A1
Es capaz de comprender y utilizar expresiones cotidianas de uso muy frecuente, así como, frases sencillas destinadas a satisfacer necesidades de tipo inmediato.
Puede presentarse a sí mismo y a otros, pedir y dar información personal básica sobre su domicilio, sus pertenencias y las personas que conoce.
Puede relacionarse de forma elemental siempre que su interlocutor hable despacio y con claridad y está dispuesto a cooperar.





Yo siempre he asistido a clases extraescolares para aumentar mi nivel de inglés porque me gustaba y porque sabía que me serviría para el futuro. En España, la utilidad de cualquier conocimiento que se posee se basa en tener títulos, en el caso de los idiomas, títulos de nivel.


Comencé a ir a academias a los 12 años. En la primera academia a la que fui, nos preparaban para hacer el Trinity. Ese examen lo preparábamos de forma intensiva durante un mes y vomitábamos todo lo que habíamos practicado ese día, bajo mi punto de vista, sin aprender realmente, ya que debíamos manejar a la perfección el tema que nosotros habíamos escogido. Al llegar al Trinity 6 y obtener el nivel B1, decidí hacer el PET de Cambridge que también certifica este mismo nivel de dominio del inglés. Este examen era mucho más completo ya que no solo había comprensión y expresión oral, a diferencia del Trinity, sino también, comprensión y expresión escrita. Por diversos motivos, terminé cambiando de academia y comencé a ir a clases particulares para preparar el First (también de Cambridge). Iba una hora a la semana a casa de una señora que se dedicaba a preparar para este tipo de exámenes. No podía dedicarme más horas a la semana porque estaba hasta arriba de grupos con distintos niveles y alumnos. Tardé 2 años, los del Bachillerato, en preparar este examen y sacar el título de nivel B2.


Al empezar la universidad, dejé de ir a academias y de preparar estos exámenes. Sin embargo, una amiga mía, que aún no se había examinado del mismo nivel que yo, solicitó la plaza en la escuela de idiomas de Pontevedra. Allí, a pesar de tener el nivel B1 y haber preparado un año el B2, tenía que volver a preparar este nivel y cursar los 2 años necesarios para obtenerlo, porque el único título que poseía era el del nivel inferior. Es por ello, que se negó a hacer dos años de inglés y decidió apuntarse a este mismo nivel de francés. Este es el único contacto que he tenido con las escuelas de idiomas a pesar de que en el pueblo donde viven mis padres hay una sección de la escuela de idiomas de Pontevedra.

Nunca recurrí a ella. Probablemente fuese por la ubicación de la escuela, que me quedaba lejos de casa, o simplemente por falta de información. En mi casa sabíamos que había una EOI en el pueblo, pero nunca preguntamos ni nos interesamos en ella, por eso creo que, simplemente, sucumbimos a la cercanía de las academias. Si hubiéramos preguntado, nos habríamos enterado de que sale más económico que una academia y que se tarda lo mismo en sacar un título de nivel que yendo a una academia. Además, teníamos la duda de si el título que expide la EOI serviría para el extranjero, ya que nos había llegado el rumor de que solo servía para el territorio español. Esta información tenía como apoyo el argumento de que las EOI son un organismo español, mientras que Cambridge, por ejemplo, es un organismo internacional. Bajo mi punto de vista y basándome en mi experiencia personal, en mi familia decidimos apostar por las academias y los exámenes de Cambridge para, así, asegurar que los títulos de nivel servirían en el extranjero en caso de necesitarlos.



¡GRACIAS POR LEERME!

1 comentario:

  1. Hola Samu!! Enhorabuena por la entrada (y por el resto del blog, en general); no solo me parece que está muy bien redactado, sino que se hace agradable de leer porque planteas unos contenidos interesantes y bien pensados de forma sencilla pero completa.
    En la línea de esta entrada en particular, mi experiencia es similar a la tuya, ya que en mi casa siempre abogamos por las academias y los profesores particulares (estos últimos en especial) en vez de por la EOI. Principalmente, tomamos esta decisión por el aprendizaje personalizado que ofrecen las clases particulares y por la comodidad horaria y de localización, ya que ni siquiera me tenía que mover de mi casa. Por el contrario, el horario fijo y extenso de la EOI nos parecía difícil de casar con la participación en las demás actividades en las que participaba.
    No obstante, a día de hoy, que tengo unos conocimientos un poco más extensos sobre esta institución, me parece que tiene muchas ventajas con respecto a las demás opciones.
    Desde el punto de vista docente, en muchas ocasiones he recomendado a mis alumnas que valoren apuntarse la EOI (aún en mi propio detrimento) ya que me parece que el trabajo cooperativo dentro de un grupo-aula es muy beneficioso para la adquisición de conocimientos de lenguas, sobretodo ante casos de déficit de atención u otras necesidades especiales de aprendizaje.
    Personalmente, valoro en un futuro (en el que tenga un poco de tiempo) apuntarme yo misma a otros idiomas, porque desde luego, la oferta es más variada que en las academias y los docentes, normalmente, están mejor formados en pedagogía.

    Por otro lado, tu entrada me ha hecho reflexionar sobre la importancia que se les da a los títulos oficiales en la actualidad y el prestigio del que gozan las instituciones internacionales solo por el mero hecho de serlo.
    Obviamente, en muchas ocasiones pertenecen a universidades prestigiosas, por lo que eso asegura de cierta manera su calidad, pero hay muchos organismos españoles que podrían ofrecernos estudios de la misma calidad y son infravalorados por ser empresas pequeñas o academias locales. Principalmente que esto se debe a la meta de conseguir un título que nos 'valga para algo', es decir, los aceptados para estudios posteriores, becas o puestos laborales. No obstante, me parece muy importante que el Gobierno, en primer lugar, y nosotros, a nivel individual, revaloricemos las escuelas de idiomas nacionales y las academias de menor tamaño, guiándonos por su calidad real y no por su tamaño o reconocimiento.

    Seguiré al tanto de tu blog :)
    Un saludo!!

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